*DESTAPONAR EL DARIÉN O DESTAPONAR INTERESES OSCUROS*
Por. *Sergio Villamonte*
De manera insistente han aparecido dos artículos casi simultáneos en un periódico de la localidad escritos por el señor Omar Jaén Suárez donde se plantea la necesidad de abrir o destruir la trocha selvática limítrofe con Colombia conocida como el Tapón del Darién.
Es evidente que el señor Suárez escribe al servicio de ciertos intereses por el nivel de interés y maniqueísmo con el que escribe sus artículos. Según él, todo el que se opone a dicho "destaponamiento" es alguien corto de visión y sin ningún interés por modernizar a Panamá, razón por la cual usa el concepto "tapón mental". Minimiza el grado de impacto que pueda tener dicho "destaponamiento" y nos compara con otros países en Asia donde las fronteras son más grandes y hay comunicación fluida entre las fronteras nacionales para permitir un intercambio fluido y cultural. Sin embargo, los que hemos seguido de manera responsable este asunto del tapón del Darién sabemos que detrás de la propuesta para construir una carretera y otras vías de comunicación con Colombia pasando por encima de la flora y fauna del lugar se esconden intereses comerciales depredadores que han visto en la selva del Darién como una forma de hacer negocios millonarios de manera fluida.
Es innegable que existe un mercado negro que ha venido destruyendo de forma paulatina los bosques del Darién sin que exista ninguna autoridad ambiental que le ponga freno a la extracción de maderas valiosas como el cedro, bálsamo, caoba, cocobolo y otros. Pero teniendo una carretera sería mucho más rentable y económico para las empresas madereras depredadoras, sacar esos productos y acabar definitivamente con lo que queda de bosque y vida silvestre en Darién. Tal parece que el señor Omar Jaén Suárez es un mercenario de la pluma que escribe cuanto artículo se le sugiera a cambio quizá de una recompensa.
La pregunta que nos viene a la mente es ¿Quiénes son los empresarios y empresas que están detrás de tanto afán por destaponar el Darién? No es un asunto de tabú o mito según el sugiere, sino que se trata de la supervivencia de miles de especies que se encuentran en Darién y hasta un asunto de seguridad nacional. El destaponar Darién también le abriría paso expedito a cuanto grupos de narcos que existen en Colombia haciendo que Panamá se convierta aceleradamente en una especie de depósito de drogas que esperan su turno para llegar a los mercados de Europa y EEUU.
Recuerdo que para la década de los ochentas, múltiples compañías mineras empezaron a realizar sus cabildeos para tener acceso a la explotación de metales preciosos ocultos en la geografía panameña. Para tal fin contrataron el servicio de escritores como el señor Suárez y otras empresas publicitarias y hacernos creer que la explotación minera traería prosperidad y bienestar a las poblaciones aledañas a los proyectos. Todo fue pintado color de rosa como suele ocurrir cuando las mega empresas depredadoras persiguen su objetivo. De hecho muchas de estas compañías una vez lograron sus objetivos de explotación se empezó a develar rápidamente sus maquiavélicas intenciones.
Resulta que mucho del personal que se contrató para estas minas eran extranjeros aduciendo que las compañías necesitaban personal con conocimiento y experiencia en estos menesteres. Las condiciones laborales también eran insalubres y una vez terminada la extracción del cobre y oro los cuales constituyen recursos no renovables nos quedaron las secuelas de la contaminación mortal al medio ambiente y salud de las personas que se suponen iban a ser minimizadas de acuerdo a la propaganda engañosa previa a dichos proyectos.
Hoy día nuevamente los mercaderes del llamado "desarrollo" nos hablan de las bondades que traerá el destaponar el Darién, pero muchos sabemos que es el mismo espejismo que se planteó con el desarrollo minero. Pan para hoy y destrucción para mañana. Pero al parecer al señor Omar Jaén Suárez le tiene sin cuidado esta parte de destrucción y acaparamiento o será que el mismo ya es socio de estos intereses oscuros?
Los panameños que creemos en el sostenimiento de nuestra diversidad biológica y en la seguridad territorial le diremos un rotundo NO al "destaponamiento del Darién".
_EL AUTOR ES ABOGADO_
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